Científicos bahienses buscan relocalizar las obras portuarias
Se trata de la ampliación del puerto y la instalación de una planta regasificadora en el estuario de la ciudad del sur bonaerense. En los próximos días, se expedirá el Organismo para el Desarrollo Sustentable de Buenos Aires sobre la controversia ambiental.
Agencia CTyS - La polémica se encendió hace nueve meses, cuando fueron anunciadas obras de modernización del puerto en los Humedales que componen el estuario de Bahía Blanca. La situación se complicó aún más cuando vecinos de las localidades aledañas de Cerri e Ingeniero White se enteraron de que en la zona se realizaría un dragado de 6 kilómetros que modificaría para siempre la fisonomía de la región.
Ante esta situación, investigadores de la Universidad Nacional del Sur, la Universidad Tecnológica Nacional y del CONICET decidieron recopilar estudios de distintas disciplinas que explican los peligros para la biodiversidad ante los cambios medioambientales, lo que justificaría una relocalización de las obras.
El último documento emitido por la Universidad Nacional del Sur indica que la única salida es la ubicación del dragado en otro sitio del ecosistema. En diálogo con la Agencia CTyS, el doctor en Biología y miembro de la Comisión, Pablo Martín, destacó que “hay localizaciones alternativas dentro del mismo estuario de Bahía Blanca, que son más adecuadas desde la accesibilidad y la infraestructura disponible”.
La “Comisión Multidisciplinaria para el estudio integral del Proyecto GNL Puerto Cuatreros”, compuesta por 24 científicos bahienses, presentó un informe en el que destacó: “no hay que hacer un análisis parcial tiende a subestimar los impactos globales generados por los efectos aditivos o sinérgicos”.
Además, los especialistas recomendaron que “se debe proveer información detallada sobre la problemática para hacer un adecuado encuadre jurídico, ya que implica desequilibrios ecológicos incalculables para la región”
Luego de sumarse adhesiones al informe de los investigadores, el 16 de noviembre de 2011 se realizó una Audiencia Pública a la que asistieron científicos y vecinos de las localidades afectadas. En esa reunión, se propuso pedir la intervención al Organismo para el Desarrollo Sustentable de la provincia de Buenos Aires, lo que aceptó tanto la empresa vinculada al proyecto como la municipalidad.
El problema: el sitio elegido
Aunque los estudios de Impacto Ambiental presentados al OPDS por las empresas intervinientes esgrimen nulas consecuencias para la zona, el investigador bahiense precisó que “el dragado alteraría todo el canal principal del estuario en su zona interna, la más especial y vulnerable, pero si se reubica los daños disminuirían considerablemente”.
El pasado 20 de enero asumió el nuevo presidente el Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, Hugo Borelli quien prometió “el desarrollo portuario con una postura amigable con el ambiente y la defensa de los sectores de recreación”. El funcionario advirtió que acatará la postura del OPDS y sentenció: “el puerto debe desarrollarse”.