Peligra la incorporación de investigadores al CONICET
Científicos advirtieron que el Presupuesto Nacional para el 2017 no dispone de partidas para incrementar el personal del organismo. Hay más de 1.500 profesionales a la espera de una respuesta.
(Agencia CTyS) – El gobierno nacional ratificó un aumento de 1.200 millones de pesos para el área de Ciencia y Técnica, pero la comunidad científica sostiene que el incremento debería ser de, al menos, 4.400 millones de pesos para mantener los salarios y las investigaciones en curso.
De aprobarse el esquema planteado por el Poder Ejecutivo, uno de los organismos que más vería menguada su capacidad de gestión es el CONICET, que contaría con menos del 5 por ciento de su presupuesto para gestionar y que no tendría recursos disponibles para continuar con el incremento de su planta de investigadores en un 10 por ciento anual.
“Prácticamente, no habrá ingresos a la carrera de investigador científico en este lapso porque no está prevista esa partida. Nosotros podríamos resolver esta circunstancia con alrededor de 1.200 millones más, pero no los tenemos y esto también pone en riesgo la asignación de las becas”, explicó la Dra. Dora Barrancos a Radio Belgrano AM 950.
En diálogo con Radio Universidad FM 89.1, el Dr. en Física Jorge Aliaga apuntó que, desde 2004, el sector de Ciencia y Técnica se rige por el plan estratégico Argentina Innovadora 2020, que tiene como meta el aumento de los recursos humanos en esa área para promover el desarrollo tecnológico nacional.
Para cumplir con esta política y llegar a tener 15 mil profesionales en el 2020, el CONICET debía sumar un 10% de profesionales por año. Sin embargo, Aliaga sostiene que, de los 900 investigadores que debían ingresar en 2016, solo 500 pudieron hacerlo.
“Este año hubo una evaluación para los que tienen que ingresar el año que viene, pero todavía no se conocen los ganadores porque se está esperando el presupuesto”, remarcó el especialista y agregó que los estudiantes de doctorado y posdoctorado becados por el organismo se encuentran en la misma situación.
“La beca —destacó Barrancos— es un beneficio que se otorga a la gente que se está formando. Son estipendios: cinco años para formación doctoral con derechos. Luego que se termina la tesis, se puede aplicar para dos años más para el programa posdoctoral”.
En esa línea, la socióloga e historiadora feminista subrayó: “Son siete años de inversiones en la formación de esos científicos que, en este momento, estaban apostando a ingresar a la carrera de investigador, uno de los modelos notables en América latina”. Y aclaró que, actualmente, hay 1.500 profesionales esperando los resultados de su evaluación para ingresar al CONICET.
Financiamiento
Otra de las áreas que disminuyeron sus recursos es la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCYT), dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (MINCYT). Durante 2016, el organismo encargado del financiamiento de investigaciones públicas y desarrollo industrial contó con más de 1.270 millones de pesos. Para 2017, esta partida disminuirá un 32 por ciento en pesos y un 57 por ciento en dólares.
La ANPCYT está subdivida en distintos programas de fondos: el FONCYT y el FONTAR . El FONCYT provee subsidios, programas y prestaciones para hacer investigación desde el CONICET, las universidades u otros organismos.
El FONTAR, por su parte, otorga financiamiento a empresas grandes, medianas y pequeñas para hacer mejoras de equipamiento y de tecnología, para recibir asesoramiento y para hacer algún desarrollo en conjunto con un equipo de investigadores. Dos pilares para el desarrollo productivo local.
Integrada en la cartera de Ciencia y Técnica, la Agencia es una de las instituciones que no solo no creció al ritmo del Presupuesto Nacional —que, en total, aumentó un 50,54 por ciento— sino que disminuyó en un alto porcentaje su participación. Según Aliaga, “las políticas de largo plazo sufren un recorte por un tema circunstancial”.
Como contrapartida, el investigador y ex funcionario advirtió que “el área que más sube y que más llama la atención es la de Servicios de la Deuda Pública, que pasa del 6 por ciento del presupuesto al 10 por ciento. Es decir, sube 90.000 millones de pesos”.
A poco de que se sancione el proyecto de ley de presupuesto y luego de una manifestación de la comunidad científica frente al Congreso de la Nación, Dora Barrancos reafirmó la necesidad de replantear las partidas al sector científico y de discutir el rol de sus colegas.
“La politización es elemental porque no hay ciencia que no esté politizada en términos sociales: servimos a ciertos intereses que tienen que ver con el bien social, con bienestar de comunidades y con desarrollos más dignos de la condición humana”, concluyó.