Cada vez más cerca del comienzo de una nueva era
Los humanos hemos marcado un antes y un después en la historia de la Tierra. Los científicos coinciden en que hemos provocado el surgimiento de una nueva era geológica: el Antropoceno, si bien resta definir en qué momento se inició.
Agencia CTyS-UNLaM - La investigadora Elisa Beilinson, del Centro de Investigaciones Geológicas (CIG, CONICET-UNLP), explicó que “para determinar una nueva era geológica debe ocurrir un evento que modifique la dinámica geológica y biológica a nivel global y especialistas de todo el mundo coinciden en que los humanos hemos provocado cambios suficientes para considerar que ya estamos en el Antropoceno”.
La geóloga comentó a la Agencia CTyS que, si bien desde el año 2000 se habla de la existencia de una nueva era, aun falta un paso para que se la defina oficialmente: que la Unión Internacional de Estratigrafía establezca en qué momento se inició.
En este sentido, se ha dado un gran paso en los últimos días. Un grupo de geólogos, paleontólogos, antropólogos y arqueólogos de todo el mundo ha realizado una publicación en la revista Science que tiende a marcar el inicio del Antropoceno hace unos 200 años, cuando se produjo la Revolución Industrial.
No obstante, Beilinson añadió que hay quienes sostienen que el inicio del Antropoceno podría ser aun más reciente y podría estar marcado por el lanzamiento de bombas atómicas a mediados del siglo pasado.
De hecho, la actividad nuclear ha dejado señales atmosféricas a nivel global. “En los testigos de hielo de la Antártida, como así también los hielos del polo norte, queda atrapado el aire de las distintas épocas y se observa la presencia de isótopos radiactivos en la composición del aire desde 1950”, aseveró la investigadora. Y agregó: “Si bien la radiación no alcanza una concentración que sea nociva para los humanos, es capaz de regular muchos de los procesos geoquímicos, físicos y biológicos en el Planeta”.
Muchas veces, cuando se habla de que el hombre alcanzará o dará inicio a una nueva era, se piensa en un estadio de armonía y paz. Sin embargo, la nueva era que se conoce con el nombre de Antropoceno es producto de una concentración demográfica desproporcionada, una producción de residuos que aun no encontró techo y hasta el lanzamiento de bombas atómicas.
Las teorías del protoantropoceno
La doctora Beilinson aseveró que va ganando la pulseada el grupo de especialistas que considera conveniente poner el comienzo del Antropoceno hacia el año 1800 (o, acaso más tarde, por 1950), pero indicó que también hay una corriente que pone en valor los cambios que ha producido el hombre desde tiempos mucho más lejanos.
“Hay otro grupo de investigadores que dice que, desde que el hombre desarrolló ciertas tecnologías hace unos 15 mil años, ejerció modificaciones considerables en el ambiente, si bien minúsculas en comparación a la que hacemos hoy”, contó.
Sin embargo, en aquel entonces, la población humana era mucho menor a la actual y los cambios que producían difícilmente hayan alcanzado una escala global. “Además, ubicar el comienzo del Antropoceno hace 15 mil años tendría otro gran problema: que, actualmente, se considera que el Holoceno se inició hace 11.700 años y los científicos del mundo estamos de acuerdo en ello”.
Para que la Unión Internacional de Estratigrafía (IUGS) dé por asentado el comienzo de una era geológica, se deben reunir muchas pruebas en distintas partes del mundo. “La última publicación en Science es un acercamiento más a consolidar formalmente la existencia del Antropoceno, porque las publicaciones científicas sirven de respaldo para ir a presentarlas ante las comisiones de la IUGS donde ya hace años se debate para definir la fecha límite en que comenzó al Antropoceno y finalizó el Holoceno”, relató Beilinson.
Los cambios de la nueva era
Hay sitios donde se encuentran restos culturales de actividad humana; por ejemplo, una lata de gaseosa en un río. Pero los cambios en la química y en la física de los sedimentos, rocas y hielos son a nivel global y solo se pueden explicar por la presencia humana.
“Si hoy vas a un río y tomas muestras, vas a notar que la química del agua está impactada por procesos humanos”, ilustró la investigadora del CIG a la Agencia CTyS. Lo mismo ocurre en la roca y el hielo de todo el mundo.
Los humanos no solo han modificado la composición químíca oceánica y atmosférica, sino que también han cambiado el curso de ríos y lagos. “A partir de la construcción de grandes represas, impactamos en la dinámica interna de los continentes”, consideró Beilinson.
Para que haya un cambio de era geológica debe notarse un cambio en los sedimentos. Estos cambios, suelen provocar modificaciones en las especies que habitan el Planeta. Por ejemplo, el fin del Cretácico coincidió con la extinción masiva de dinosaurios no avianos.
La presencia humana, sea por el avance de la agricultura, por la tala de árboles, por la construcción de represas o de grandes ciudades, ha provocado consecuencias en el ecosistema, pero éste no sería un aspecto claro para definir a la nueva era.
De hecho, los hombres han provocado que llegaran nuevas especies a América a partir de la colonización. “En los restos fósiles, pueden encontrarse fósiles de perros, vacas, ratas desde entonces, pero esta modificación es anterior al inicio que se estaría determinando para el Antropoceno”, diferenció la especialista.