Exitoso lanzamiento del primer nano satélite argentino
Fue eyectado a la 1.15 de la madrugada, desde China, y cerca de las 9 de la mañana estableció su primer contacto con la estación terrena ubicada en Bariloche. Su misión será tomar imágenes de las estrellas.
(Agencia CTyS) Ahí va el Capitán Beto, por el espacio. No es la nave de fibra fabricada en Haedo que describió el ya mítico “Flaco”, pero observa los objetos que lo rodean desde su órbita, a 650 kilómetros de la Tierra.
Ya es un hito en la historia espacial argentina. Fue diseñado y construido totalmente en el país por la empresa Satellogic en colaboración con el INVAP, a partir de una inversión de 6.300.000 pesos del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.
El ingeniero Emiliano Kargieman, CEO de Satellogic y responsable del proyecto, valoró este acontecimiento en diálogo con la Agencia CTyS: “Como es un satélite pequeño y económico, cuesta entre mil y 10 mil veces menos que los tradicionales. Tener la capacidad en la Argentina de lanzar estos satélites nos pone en un lugar donde se abren posibilidades para grupos de investigación, para estudiantes y para pequeñas empresas que deseen enviar tecnología al espacio”.
Pero el “Capitán Beto”, cuyo nombre original es CubeBug-1, no viajó solo. Fue lanzado junto al satélite ecuatoriano NEE-01 Pegaso, a bordo del cohete LongMarch 2 desde el Centro Espacial de Jiuquan en China.
El movimiento del satélite es monitoreado desde la cede Bariloche del INVAP. “Pudimos escuchar el satélite y estamos terminando de poner a punto los procedimientos y la automatización de la estación terrestre. El satélite va a pasar dos o tres veces cada doce horas sobre Bariloche”.
Apertura espacial
El pequeño artefacto, cuyo nombre homenajea a Luis Alberto Spinetta, dio sus primeras señales desde el espacio esta mañana, donde un radioaficionado holandés recibió el primer contacto. Pocos minutos después, la señal fue captada por otro aficionado a la astronomía de Bahía Blanca.
Lejos de encapsular los resultados en laboratorios especializados, las imágenes del firmamento, que captará “Capitán Beto” con su cámara mientras surca la galaxia, podrán ser disfrutadas por todas las personas en todo el mundo.
“Vamos a mostrar el diseño mecánico, el de software y el de hardware para que las universidades y los centros de investigación lo puedan utilizar. Por otro lado, una vez que completemos la etapa de prueba, vamos dejar disponible para la comunidad de radioaficionados la posibilidad de conectarse con el satélite para bajar información de la cámara en forma directa”, remarca el ingeniero.
Mientras el pequeño “Capitán Beto” orbita alrededor de la Tierra, Kargieman se muestra optimista: “Personalmente, creo que los nano satélites son el futuro de la tecnología espacial. Las cosas que se hacen con satélites tradicionales se pueden hacer también con otros más pequeños, y no tengo dudas de que van a tomar cada vez más preponderancia”.